21 junio 2007

Hasta luego, querida Ruth Graham!

El pasado 14 de este mes partió con el Señor nuestra querida Ruth Bell Graham, a la edad de 87 años. En memoria de ella, traduzco esta porción tomada de Billygraham.org. Dejemos que sea el mismo Billy Graham quien nos diga quien fue su amada:

Mi esposa Ruth fue la más increíble mujer que he conocido. Doquiera me pidieran que nombrara al mejor cristiano que yo conociera, siempre respondí: "Mi esposa Ruth". Ella fue un gigante espiritual, cuyo conocimiento sin paralelo de la Biblia y compromiso con la oración fue un desafío y una inspiración a todos los que la conocieron.

Mi foto favorita la muestra sentada en nuestro porche delantero a la salida del sol, leyendo tranquilamente su Biblia y sorbiendo café — su rutina diaria por largos años. Nunca hubo una noche en que no estuviéramos juntos, estrechando nuestras manos y orando antes de dormir. Ruth también fue una madre maravillosa.

Su tarea no fue fácil puesto que yo estaba ausente de casa a menudo, pero ella condujo a nuestros niños tanto con gran amor como con sabia disciplina. Ella sintió que ese era su llamado, y sin su voluntad para soportar la principal responsabilidad de criar nuestros niños, mi trabajo simplemente no habría sido posible. Pasó horas cada semana enseñando la Biblia y orando con cada uno de ellos.


También era divertida, siempre lista para gastar una broma a alguien. ¡Nuestros niños sabían que la vida nunca era aburrida con Ruth alrededor! Estaba comprometida con su iglesia y su comunidad. Fue una devota mujer de iglesia que amó su herencia presbiteriana, la cual vino de sus padres que fueron misioneros médicos en China. Tuvo amistad con las esposas de varios presidentes y había sido recibida en ocasiones por la Reina Elizabeth II, pero cuandoquiera que ella escuchara de alguna necesidad en nuestra comunidad, siempre estaba allí para ayudar con comida, flores o en otras maneras. Muchas personas fueron a ella buscando un consejo y fue una amiga íntima para las esposas de muchos colegas.

Ruth amaba los deportes y fue muy atlética, aunque raramente realizó deportes propiamente. Años atrás, mientras arreglaba un columpio para algunos de nuestros nietos, al escalar el árbol, este se quebró y ella cayó de unos 4 metros de altura. Se fracturó varios huesos (incluyendo una vértebra), y luego nunca fue la misma, físicamente. Por años ella soportó un dolor de espalda muy severo y fue hospitalizada aquí en Asheville y en la Clinica Mayo en Rochester por ésta y otras dolencias. Ella fue una persona mansa, sonriente, y amable cuya meta primaria era vivir para Cristo y reflejar Su amor.

En sus últimos días, habló repetidamente de Cielo, y aunque probablemente yo la extrañe más de lo imaginable, me regocijo que algún día pronto seremos reunidos en presencia del Señor que ella amó y sirvió tan fielmente.

Una excelente recopilación de fotografías puede ser vista aqui.
Dios te bendiga, querido Billy, y te de fortaleza en el tiempo que te resta entre nosotros.

Amén...

1 comentario:

OSEAS MORALES dijo...

UN GRAN EJEMPLO NSTRA HERMANA RUTH!
UN GRAN EJEMPLO! Y Q ¡"DIOS BENDIGA!" Y FORTALEZCA MUCHO A NTRO HERMANO BILLY GRAHAM Y A TODA SU FAMILIA!
ATTE: OSEAS MORALES. MEXICO.